5169 Limpiador, sistema inyección diesel Liqui Moly, Recambios colmenar, recambios de coche y moto
Limpiador de filtro de partículas diésel
Liqui MolyApplication
La limpieza se realiza con la pistola pulverizadora con depósito a presión para DPF (n.° de art. 7946) y la lanza DPF con 5 sondas pulverizadoras (n.° de art. 7945) especialmente desarrollada. Según el modelo de vehículo, será necesario preparar un acceso al filtro de partículas diésel. En la mayoría de vehículos, para ello se debe desmontar el sensor de temperatura o de presión del filtro de partículas diésel. Indicación: Durante la limpieza, la temperatura del filtro de partículas debe estar por debajo de 40 °C. En algunos vehículos, el filtro de partículas diésel no se encuentra en los bajos del vehículo, sino que se halla cerca del colector de escape o, dado el caso, del turbocompresor por gases de escape. Por razones de seguridad, al limpiar estos vehículos es preciso prestar la máxima atención para asegurarse de que no entre líquido limpiador o solución de enjuagado en la cámara de combustión a través de una válvula de escape abierta.
A través de la abertura creada, se introduce en el filtro de partículas la sonda pulverizadora adecuada al modelo de vehículo. Pulverizar toda la cantidad (1 l) de Pro-Line Limpiador de filtro de partículas diésel en varios intervalos de 5-10 segundos, con pausas de 5-10 segundos y a una presión de servicio de 6-8 bar, directamente sobre la superficie del filtro de partículas. Para humedecer el máximo de la superficie, la sonda deberá girarse y moverse adelante y atrás durante el proceso de limpieza. Dejar actuar el limpiador aproximadamente 15 min. A continuación, regenerar el filtro de partículas con la cantidad total de solución de enjuagado de filtro de partículas diésel (500 ml). La aplicación también se realiza con la pistola pulverizadora con depósito a presión para DPF y con los mismos intervalos que con el líquido de limpieza. Con la limpieza se desprende el hollín y se distribuye en el filtro de partículas. De este modo, se incinera mediante una regeneración normal. Tras volver a montar el sensor, el concesionario o el taller deberá iniciar una regeneración según las especificaciones del fabricante.